Una de las partes distintivas de un club de fútbol, y de reconocimiento con todos sus aficionados y seguidores, son los colores con los que viste un equipo y con los que nos sentimos totalmente identificados. Y, ateniéndonos a esta circunstancia, nos podremos encontrar con clubes que no habrán cambiado sus colores desde su nacimiento, otros que habrán mutado a las conveniencias de los tiempos y situaciones e, incluso, habrá algunos clubes que los habrán modificado completamente adoptando unas nuevas tonalidades, según sea el interés y las circunstancias. Lo cierto es que la expresión «identificarse con los colores» no es baladí y todos, en mayor o menor medida, nos sentimos hermanados con los colores de nuestro equipo preferido.

Los colores y sus combinaciones suelen ser limitados para vestir una camiseta de fútbol. Con el tema del diseño de las zamarras ocurre otro tanto de lo mismo. Con respecto a los primeros, los colores lisos o combinados suelen predominar en el mundillo futbolero, estableciéndose un gran predominio del rojo, del blanco, del azul y del verde. Con respecto al diseño de las mismas, los que más abundan son los diseños lisos, seguido por el de las rayas verticales. Hasta aquí, creo que no descubrimos nada que no vengamos observando semana tras semana y liga tras liga, desde el inicio de este deporte.

Una vez establecida estas premisas básicas, vamos a centrar de lo que queremos hablar en el día de hoy. Hoy queremos hacer especial hincapié en las llamadas «Camisetas de equipos con colores raros» y que, a veces, nos encontramos en algún club perdido en algún campeonato poco conocido o que no teníamos referenciar de él y no sabíamos de su existencia (recordad que hay miles de clubes). Como colores raros en el fútbol, y aunque exista alguna discrepancia, se puede hablar principalmente de 4 de ellos: el marrón, el magenta, el rosa y el gris. Ya es extraño ver a algunos conjuntos que luzcan como indumentaria principal estos colores. Sí es cierto que nos los podemos encontrar, con una relativa frecuencia, en las vestimentas alternativas e incluso en las terceras equipaciones de los equipos, pero establecidos como color principal de un club es realmente difícil.

El color marrón, como ya hemos comentado, es un color que no suele ser utilizado por muchos equipos de los miles que existen en el mundo del fútbol. Quizá las escuadras más representativas y más conocidas que lo usan sean el FC ST Pauli de Alemania que juega en la Bundesliga 1; el club argentino CA Platense, de la primera división argentina; el también argentino Centro Juventud Antoniana de la ciudad de Salta y el CA Atlas de la 4ª división. Además de los mencionados, existen también otros equipos que visten de marrón y que pertenecen a las ligas de Polonia, Noruega, Arabia e incluso de Etiopía. Pero, en total, estamos hablando de aproximadamente 10 equipos de cierto nivel en todo el mundo.

Otro de los colores «extraños» para vestir a un equipo de fútbol es el color magenta. Y existen equipos que visten de magenta. Por citar algunos ejemplos de clubes que utilizan esta indumentaria, citaremos a uno de los más conocidos a nivel general. Se trata del Cerezo Osaka japonés, que disputa, en estos momentos, la J1 League, que se corresponde con el máximo nivel en el fútbol de Japón. En este mismo país nos encontramos con el Sagan Tosu, cuyos colores son el magenta combinado con el azul, aunque en este caso está disputando la 2ª división, es decir, la J2 League; o, por citar a un tercero, el Dulwich Hamlet inglés, que milita en la 7ª división y cuya zamarra, siempre con los colores azul oscuro y magenta, cambia de diseño todos los años. 

Con respecto al rosa, sus máximos representantes actualmente son el Palermo FC de la serie B italiana y el Inter Miami CF de la MLS estadounidense (el actual equipo de Lionel Messi). Asimismo, usa estos colores rosados el Club Sport Boys de la ciudad peruana de El Callao e integrante de la 1ª división de Perú. Ampliando un poco la información, vistieron estos colores, pero en la actualidad ya no lo hacen, el club irlandés Wexford FC, quienes cambiaron en el año 2017 a un tono más oscuro, casi morado y, a nivel de selecciones, la escocesa (la selección de fútbol más antigua del mundo), que en las últimas dos décadas del siglo XIX y en algunas ocasiones a lo largo del siglo XX, también vistió con tonos rosas en sus camisetas.

Para finalizar con los tonos de colores extraños para las vestimentas futboleras, nos encontramos con el gris y, realmente, muy pocos equipos visten de gris. Con remera totalmente gris se uniforma el equipo italiano US Alexandria Calcio, militante actualmente de la Serie B italiana; otro que usa esta gama de color es el colombiano Tigres FC de la ciudad de Bogotá que disputa la 2ª división de ese país; al igual que el saudita Al-Tai Saudi, también de 2ª división. Que lleven algún tono gris importante en su camiseta, detallamos, a continuación, una pléyade de equipos que combinan el gris con algún otro color. En este orden de cosas, hacemos referencia al guatemalteco Deportivo Calchá, que combina habitualmente el gris con el rojo y el negro; el ecuatoriano CS Emelec que viste de azul con una franja gris en diagonal. Y, quiero dejar para el final, mis dos zamarras favoritas con esta coloración gris. La primera de ellas es la del italiano US Cremonese que calza una camiseta a rayas verticales grises y rojas, equipo militante de la serie B y, finalmente, la samarreta delCE Júpiter del barrio de Pueblo Nuevo, de la ciudad española de Barcelona, militante del 7º nivel del fútbol español y que viste una remera a rayas verticales grises y granas (muy bonita, por cierto).

ALBERTO VEGUE

Lo que a veces pasa en el fútbol argentino es difícil que pase en el fútbol de otros países. ¿Será por la pasión argentina por este deporte? ¿Será porque son contundentes en sus decisiones? o ¿Será porque cada uno hace lo que le parece más oportuno?

Vamos a tratar de ilustrar con un ejemplo un episodio que certifica el carácter peculiar del fútbol argentino y de sus integrantes y que sucedió hace ya algunos años. La historia es, cuanto menos, curiosa y divertida.

El hecho tiene como protagonista a Carlos Alberto De Marta, jugador de fútbol, nacido en el año 1951 y fallecido en 2016. Fue un trotamundos del fútbol que vistió las camisetas de bastantes equipos, tanto en la máxima división como en el Nacional B. Equipos tales como Estudiantes de la Plata, Temperley, Belgrano de Córdoba, Los Andes, Huracán, Argentino de Quilmes, Defensores de Cambaceres y Cipolletti. Jugó en 1ª división un total de 189 partidos, consiguiendo 9 goles a lo largo de toda su carrera. Jugaba en la posición de centrocampista.

Dato importante a señalar es que el amigo De Marta era sordomudo de nacimiento. Esta circunstancia no significó nunca un hándicap para desarrollar una importante carrera en este deporte, sino que, por el contrario, siempre tuvo un afán de superación pocas veces visto.

Los hechos que vamos a narrar sucedieron en la 6ª fecha del campeonato nacional de 1972, concretamente un 8 de noviembre de 1972, y en la disputa de un encuentro entre Huracán y Estudiantes de la Plata (equipo en el que militaba en esos momentos).

Nos situamos en la cancha de Huracán, el estadio Tomás Adolfo Ducó en Parque Patricios (conocida popularmente como El Palacio), en la ciudad de Buenos Aires. Huracán ganaba por 2-0 cuando, en un momento determinado del partido, el trencilla de la contienda, Washington Mateo, pitó un penalti a favor de Estudiantes. Instantes después y a instancia de uno de sus linieres, el árbitro, rectificó la decisión tomada y cambió el penalti por un tiro libre sobre el área del Globo. Y la que se armó fue tremenda. Los jugadores de Estudiantes, no complacidos con la permuta, rodearon al árbitro, le protestaron airadamente, le insultaron y hubo sus más y sus menos. A tenor de como se estaban desarrollando las circunstancias, el referí tiró de tarjetas para intentar controlar la situación y le mostró la cartulina roja a un jugador del Pincharratas. ¿Y a quién se la mostró? Pues fue al pobre de De Marta, alegando el Sr. Wasington Mateo que este jugador le había insultado e injuriado gravemente. Craso error, pues a menos que el árbitro entendiera el lenguaje de los signos…., ya que como hemos mencionado anteriormente Carlos Alberto De Marta era sordomudo de nacimiento y no articulaba palabra.

Como no podía ser de otra manera, Carlos Alberto De Marta recurrió su sanción, alegando su sordomudez, y el Tribunal de Disciplina de la AFA, a tenor de esta circunstancia, le rebajó la sanción a un partido, en lugar de los que en un principio le habían sancionado. Sigo sin lograr entender como una persona muda puede insultar de palabra, ni puedo comprender, tampoco, como un organismo de arbitraje no anulara la sanción, si era imposible que el jugador dijera palabra alguna. En fin, cosas del fútbol argentino.

Finalmente, el partido terminó con el resultado de 5-1 para Huracán.

Y un apunte para el anecdotario. Cuentan que Carlos Bilardo, cuando entrenaba a Estudiantes y tenía en sus filas a Carlos Alberto de Marta, no le dejaba ir a rematar los saques de esquina a favor de su equipo. La razón no era otra que, como además de mudo era también sordo, no oía a los defensores del equipo contrario gritar «salimos» y el pobre De Marta se quedaba siempre en fuera de juego.

Quiero finalizar mostrando toda mi admiración, a título póstumo, a Carlos Alberto De Marta por su lucha inquebrantable contra esa minusvalía que nunca le impidió estar siempre en un primer nivel.

ALBERTO VEGUE

El fútbol apareció en el actual barrio barcelonés de Sant Andreu del Palomar (San Andrés del Palomar) allá por el año 1900 y, como ocurrió en otras partes del mundo, fueron los ingleses que trabajaban en las fábricas de tejidos que existían por esos lugares (como Fabra y Coats), quienes trajeron este deporte a esta zona de la ciudad.

En el año 1909 se crea un equipo llamado Andreuenc FC, quien empieza a competir en el Campeonato de Cataluña de Juniors. Con el paso de algunos años y como ha ocurrido en decenas de equipos, el Andreuenc sufre una escisión por parte de algunos de sus componentes, quienes forman un nuevo conjunto denominado L’Avenç del Sport. Ambos equipos, desligados el uno del otro, inician sus pasos deportivos participando en campeonatos regionales catalanes, ya que no existía todavía ninguna competición a nivel nacional. Así se llega al año 1925 con estos dos equipos representativos de San Andrés del Palomar, los cuales, por separado, no estaban teniendo ningún papel relevante ni destacado en las competiciones deportivas. Ante esta circunstancia, deciden unirse y formar un solo conjunto con el fin de potenciar sus actuaciones e intentar despuntar en el fútbol barcelonés. Y de esta unión surge la Unió Esportiva Sant Andreu, adoptando los colores para su camiseta de bastones verticales rojos sobre fondo amarillo del Andreuenc FC, frente a la de bastones verticales rojos y blancos del L’Avenç. 

La Unió Esportiva Sant Andreu milita actualmente en el grupo 3 de la llamada Segunda Federación, correspondiente al 4º nivel del fútbol español. Disputa sus partidos en el estadio Narcís Sala, que tiene una capacidad para unos 6.500 espectadores y su masa social la integran alrededor de 3.500 socios aproximadamente. Viste, actualmente, con samarreta a rayas verticales rojas y amarillas (más bien 4 rayas verticales rojas sobre fondo amarillo), pantalón negro y medias rojas y amarillas. Se les conoce como «Quadribarrats», indudablemente por el diseño de su zamarra. Durante el gobierno del General Franco, debieron cambiar los colores de la misma a rayas verticales amarillas y azules, ya que las rayas verticales rojas y amarillas constituyen el color de la bandera catalana y el antiguo régimen no lo admitía. Mantiene unos disputados duelos con otro club de la ciudad, con el Club Esportiú Europa, disputándose ambos el llamado «Derbi del Pla» (Derbi del Llano), o como lo llaman los aficionados el partido de la Vila contra El Poble. La Vila por la Villa de Gracia (de donde es el CE Europa) y el Poble, en referencia la pueblo de San Andrés del Palomar.

Ha militado, a lo largo de toda su historia, durante 11 temporadas en la división de plata del fútbol español, logrando un más que meritorio 4º puesto, su mejor clasificación, en la campaña 1950/1951. En el tercer escalón de la pirámide futbolística española ha disputado un total de 19 temporadas y en el 4º (en el que actualmente está ubicado) lo ha hecho un total de 38 veces. Durante algunas etapas de su existencia se convirtió en un «equipo ascensor» por las subidas y bajadas de categoría que tenía en el transcurso de pocos años.

Debutó en la categoría de plata en el año 1950, al ganar en la promoción de ascenso al vizcaíno equipo de la SD Erandio. Desgraciadamente, el coste de mantener el equipo en esta categoría de plata era inviable para las arcas del modesto Sant Andreu y, por esta circunstancia, al finalizar la campaña 1952/1953, la directiva del equipo decide renunciar a este nivel de competición y comenzar la temporada siguiente una escala por debajo, es decir, la 3ª división. Aunque unos años más adelante retornó durante un periodo de 8 años a la categoría de plata, desde 1969/1970 hasta 1976/1977, al finalizar esta última vuelve a descender de categoría y desde entonces no ha vuelto a disputar, ni a jugar partido alguno en la 2ª división.

No debemos olvidar que, entre sus mayores logros, la Unió Esportiva Sant Andreu ha sido campeón de la Copa de Cataluña en 2 ocasiones. La primera en el año 2008, al batir en la final al RCD Espanyol por 2-1 y la segunda en 2019, batiendo en esta ocasión al FC Vilafranca por 2-0.

A lo largo de su historia, ha tenido a varios entrenadores de renombre e incluso alguno de ellos ha entrenado a la selección española de fútbol. Por citar solo algunos ejemplos, haremos referencia a Fernando Daucik (1969/1970, 1973/1974 y 1976/1977), Domingo Balmanya (1977/1978), Ferrán Olivella (1990/1991) y, más en nuestros días, Patxi Salinas (2013/2014).

Al día de hoy la Unió Esportiva Sant Andreu figura muy bien colocada en la clasificación del grupo 3 de 2ª Federación y con grandes posibilidades de disputar, al menos, las eliminatorias de ascenso a una categoría superior, a falta de 6 jornadas para el final del campeonato.

Deseamos toda la suerte del mundo a la Unió Esportiva Sant Andreu.

No deseo finalizar sin mostrar mi total agradecimiento a mi amigo Ramiro Gómez, entusiasta de los Quadribarrats, quien desde hace más de 25 años me viene comentando orgullosamente algunos avatares del equipo y que sin su ayuda me habría sido complicada la obtención de algunos datos.

ALBERTO VEGUE

Hoy vamos a hablar de uno de esos equipos llamados históricos, tanto en su campeonato de liga, como en su deambular por Europa, como en su aportación a la selección de su país. Un equipo que fue una referencia importante en días ya lejanos, pero que, por diversas circunstancias que vamos a comentar en las siguientes líneas, terminó en una gran crisis que llevó a fusiones con otro equipo de otra ciudad y a una pérdida casi total de su identidad. Nos estamos refiriendo al equipo checo del Dukla de Praga (FK Dukla Praha), un verdadero histórico del fútbol continental de mediados y finales del siglo XX.

El primitivo Dukla de Praga fue fundado el 1 de octubre de 1948, como ATK (Armadori Telocvicny Klub), constituyéndose en una de las secciones deportivas del ejército checo y siendo siempre un equipo muy politizado por el partido comunista de la extinta Checoslovaquia. Adquirió como referencia unos colores llamativos y poco comunes para lo que era el fútbol en aquellos años, eligiendo para su camiseta un rojo oscuro (burdeos) con las mangas y el cuello en amarillo, pantalón amarillo y medias rojas oscuras y amarillas. Se les conocía con el sobrenombre de «vojáci» (soldados).

En el año 1956 modificó su nombre inicial, aunque hubo un tiempo que era conocido como ÚDA Praha (Casa Central del Ejército de Praga), por el de FK Dukla Praha y lo hizo en honor a las fuerzas armadas checas que participaron en la batalla de Dukla, durante la II guerra mundial.

Sus mejores años fueron los finales de los 50 y la década de los 60 del siglo XX, periodo en los que el club destacó por encima del resto de clubes en la máxima división checa. En estos años consiguió 8 de los 11 títulos ligueros que ha ganado a lo largo de la historia de esta competición (el último en 1982), obteniendo, también, 7 subcampeonatos. Por lo que respecta a la Copa de Checoslovaquia, la ganó en 8 ocasiones, siendo la última en 1990. A nivel internacional ha participado en un número importante de ocasiones en competiciones internacionales, tales como la Copa Mitropa, la antigua Copa de Europa (hoy llamada UEFA Champions League), la Recopa (UEFA Cup Winners Cup), la Copa de la UEFA (UEFA Europa League), etc. Un club con una vasta experiencia internacional.

De la importancia de este equipo y de sus jugadores da fe la obtención del balón de oro por parte del jugador de su plantilla Josef Masopust en 1962, convirtiéndose en el primer jugador checo en obtener este importante galardón (algo más tarde, en el año 2003, lo conseguiría Pavel Nedved, formado en el Dukla Praga, cuando militaba en la Juventus de Turín). 

A partir del año 90, el equipo entra en una profunda crisis económica y deportiva, ya que había dejado de ser patrocinado por el ejército checo. Los aires de apertura y libertad que soplaban por la antigua Checoslovaquía no eran los más propicios para encontrar un patrocinador a un equipo con un fuerte pasado comunista, por lo que la búsqueda de apoyos comerciales para hacer sostenible al equipo eran muy difíciles de encontrar y los mecenas preferían apoyar al Sparta Praha. Así se llega a la temporada 1993/1994 en la que el Dukla desciende de categoría, cayendo en los años siguientes hasta la 3ª división.

Ante esta circunstancia, en el año 1996, se fusiona con el FK Pribam y compiten bajo el nombre de FK Dukla Pribam, para posteriormente llamarse únicamente FK Pribam y ya sin tener nada que ver con aquel equipo nacido en 1948 y gran campeón de las competiciones checas. No obstante, los equipos menores del antiguo Dukla siguen compitiendo con ese nombre y en la ciudad de Praga.

En el año 2001 nace un nuevo equipo en la República Checa, un nuevo Dukla Praga sin tener nada que ver con el anterior, salvo sus colores y el uso del estadio Juliska. Este nuevoDukla debió comenzar su periplo en las categorías más bajas del fútbol checo (4ª división), logrando alcanzar el máximo nivel de competición en la temporada 2011/2012, nivel que actualmente sigue manteniendo, aunque con algunos altibajos.

Al día de hoy está considerado el tercer club de la ciudad de Praga, después del Sparta y del Slavia.

ALBERTO VEGUE