A mano en la capital italiana

83C3A1C9-6483-4354-A7DC-F07BADBF0870
Acerbi y Dzeko se toman a la salida de un córner. Ambos fueron los goleadores del Derbi della capitale. Foto Gazzetta dello Sport

Roma y Lazio igualaron 1 a 1 en el Derbi della Capitale. Mejor imagen dejó la Roma. Fue más en todo el partido pero le faltó gasolina en los metros finales. Dzeko abrió el marcador y Acerbi igualó para el conjunto de Inzaghi tras un clamoroso error de Pau López a la salida de un córner. No se hicieron daño en el inicio de la segunda rueda. El conjunto de Paulo Fonseca conserva la cuarta ubicación y Lazio se mantiene en un expectante tercer lugar con un partido menos.

Roma, la ciudad eterna,  tiene a Luperca, la loba que, según la mitología, amamantó a los fundadores de la ciudad, Rómulo y Remo. Tiene el Coliseo, un monumento deslumbrante y dentro de la ciudad está el Vaticano, donde vive el Papa Francisco tan apasionado al fútbol como los tifosi romanistas y laziales. Es, probablemente, el clásico más latino de los equipos europeos. La pasión, el marco que le ponen en el Stadio Olímpico lo hace un partido atrapante.

El cuadro giallorossi impuso siempre las condiciones del partido, mejor desde el inicio del encuentro. Cengiz Ünder imparable por derecha, Pellegrini por izquierda y Kluivert indetectable por detrás de los volantes celestes. No había señales de los jugadores talentosos de la Lazio: Luis Alberto bien marcado por Veretout, el balón no le llegaba limpio a Immobile y Correa. A los 26 minutos, Dzeko abió el marcador tras una salida en falso del portero Strakosha.

A nadie tomó por sorpresa, Roma era más y merecía estar arriba en el marcador. La primera aproximación de la Lazio en el minuto 34. A la salida de un córner Pau López fabrica un problema donde no lo había, se hace un nudo y Acerbi más rápido que todos igualó el partido. Sorpresa en el estadio.

Segundo tiempo siguió en la misma tónica, El cuadro de Paulo Fonseca al mando del encuentro, el de Inzaghi expectante para responder de contra. Strakosha le quitó en 2 oportunidades el gol a Dzeko, Roma fue más, le faltó puntería final. Lo negativo para Lazio es que se cortó la racha de 11 victorias, lo positivo es que no perdió en un partido que lo tuvo en clara desventaja. Marcha expectante a 5 puntos de la Juventus y a 3 de un Inter que parece estancado en una meseta.

Laziales y Romanistas quedaron a mano, el clásico terminó en paz.

 

 

 

 

A mano en la capital italiana

Casemiro + 10

9154BBC2-98AF-40D2-82CF-E2F91A5EAEA4
Casemiro define con sutileza ante la salida de Vaclik. Ganó el Madrid 2 a 1 con doblete del brasileño. Foto Elpais.com

 

¿Que sería del Real Madrid sin Carlos Henrique Casemiro? A día de hoy es indispensable en el equipo de Zinedine Zidane. El trabajador silencioso, el que cubre a todos, el que corre por los demás y como en el día de ayer, goleador del equipo para rescatar al cuadro blanco de un partido opaco. 2 llegadas como el mejor Benzema, en el primero con un toque suave, el segundo rematando de cabeza un buen centro de Lucas Vázquez.

Probablemente, el mejor momento de su carrera. La irrupción de Federico Valverde en el equipo titular le permite a Casemiro liberarse y ampliar su radio de acción. El uruguayo comparte las tareas defensivas, eso permite liberar a Kroos y Modric, elevar la altura de los laterales y permite que uno de los 2 (Casemiro o Valverde) pueda soltarse por sorpresa y pisar el área.

El claro ejemplo es el magnifico partido que hizo Casemiro en el Camp Nou hace un mes. Omnipresente, cortando, distribuyendo, llegando. “Casemiro se hace fuerte en el Camp Nou balondominado.com/2019/12/18/cas

Sevilla jugaba cómodo en el Bernabéu, al Madrid le costaba crear peligro. Lo que no contaba el equipo de Lopetegui era con las llegadas por sorpresa de Casemiro, nadie marcó al brasileño en los 2 tantos. Primera vez en su carrera que marca un doblete en un partido. Ganó el Real Madrid y marcha puntero al comienzo de la segunda rueda de La Liga.

Sin Hazard, Ramos y Benzema, pero con Casemiro. Zidane sonríe.

Gustavo Sánchez 

@balondominado 

 

Casemiro + 10

La improvisación del Barça acaba con Valverde

F937AB47-31FA-4B4A-9AB6-832FF1BEA971
Ernesto Valverde ya no es más el entrenador del Barcelona Quique Setién será su reemplazante. Foto 20minutos.es

 

Ernesto Valverde dejó de ser entrenador del FC Barcelona. La dirigencia blaugrana quedó en un laberinto del cual no pudo salir. La filtración de la reunión que Oscar Grau y Eric Abidal tuvieron con Xavi los llevó a un callejón sin salida. Con la negativa del crack de Tarrasa, los dirigentes no les quedó otra opción que despedir a Valverde. ¿Con que fuerza podía dirigir a una plantilla sabiendo que ya no le querían?

Xavi lo pensó pero llegó a la conclusión que no era el momento. El sabe que tarde o temprano va a regresar a su casa pero no de este modo tan desprolijo. Desde el año 2003 que el Barça no despedía a un entrenador en mitad de temporada. El último había sido Louis Van Gaal tras una derrota en Anoeta ante la Real Sociedad.

Ernesto Valverde se marcha tras 2 temporadas y media. Ganó 2 Ligas pero su paso por el banquillo culé quedará marcado por las duras derrotas en Roma y Anfield. En ambos partidos el equipo se dejó remontar sin encontrar respuestas desde el banquillo. Confió poco en la Masía, compró jugadores que no rindieron. Jugó bien por momentos, a veces solo aferrado a Messi y Ter Stegen.

Desde la goleada ante Liverpool que Txingurri quedó en la mira en los dirigentes. Solo la plantilla decidió darle una nueva oportunidad. A pesar de todos los tragos amargos de Champions, no se merecía este despido. Lo más prolijo hubiese sido finalizar el contrato a final de temporada.

Llega Quique Setién, un entrenador con pocos pergaminos pero fiel representante de la filosofía blaugrana. Admirador de Cruyff y Guardiola. Un desafío enorme, tomar las riendas de un equipo a mitad de temporada, con un equipo en crisis y sin Luis Suárez.

Desafío grande, ilusión idéntica. Sueño cumplido para Setién ¿podrá escribir su nombre en la historia culé?

Gustavo Sanchez

@balondominado  

 

 

 

La improvisación del Barça acaba con Valverde

Ibra rejuvenece a un nostálgico Milan

A61A7313-D5A5-4FAC-814B-5806C7490968
El grito desaforado de Ibrahimovic. Milan ganó de visitante 2 a 0 a Cagliari. Foto Rpp.pe

 

Necesitaba el Milan esa inyección de juventud que trajo Zlatan Ibrahimovic a sus 38 años, en su regreso al Rossonero luego de 8 años. La llegada del crack sueco le cambió el estado de ánimo al conjunto de Stefano Pioli. Venció 2 a 0 a Cagliari, jugando bien, siendo superior a su rival. Rafael Leâo, quien quebró la racha negativa del equipo de 360 minutos sin convertir y el propio Ibra marcaron los tantos para el buen triunfo del Milan.

Generalmente la liga de los Estados Unidos es el destino final para lo futbolistas que han hecho una carrera brillante en Europa, supone seguir compitiendo pero sin tanta exigencia, una preparación para el retiro definitivo.

Cuando parecía que L.A. Galaxy era el club donde diría el adiós definitivo, Ibra, carismático, transgresor, rebelde, dio un golpe sobre la mesa y decidió un nuevo regreso al fútbol de élite. No sin antes provocando en su despedida, como ha sido siempre su carrera: Vine, vi y conquisté. Gracias a Los Ángeles Galaxy por hacerme sentir vivo otra vez. A los aficionados del Galaxy – Querían a Zlatan, y les di a Zlatan. De nada. La historia continúa… Ahora regresen a ver beisbol». Un genio loco.

Regresa a un Milan nostálgico, un club que no logra salir del laberinto en el que se encuentra hace años sin ver la salida. La llegada de Zlatan es un buen golpe de efecto, para tratar de contagiar a una plantilla con buenos jugadores pero sumidos en el pesimismo que rodea al rossonero.

La historia comenzó con buen pie, disfrutemos de las últimas pinceladas de un crack que, a los 38 años, vive una nueva juventud.

Gustavo Sanchez

@balondominado 

Ibra rejuvenece a un nostálgico Milan

El Barça se atasca en Cornellá

71B85462-BC66-40D2-87B0-B0200133AB09
Messi pensativo, Espanyol es todo alegría. Empataron 2 a 2 culés y periquitos en el derbi catalán. Foto Marca.com

 

Barcelona no regresó a tiempo luego de sus vacaciones. Dormido el primer tiempo, reaccionó en el complemento gracias al espíritu competitivo de Arturo Vidal. Cuando la victoria parecía segura Wu Lei se convirtió en el héroe de Medio Oriente para darle al Espanyol un empate que sabe a victoria. Finalizada la primera rueda, Barça y Madrid igualados en la cima del torneo. Arde La Liga.

Arturo Vidal es el menos futbolista ADN Barça, sin embargo es el jugador que Valverde recurre cuando no alcanza con el toque. El ex Bayern Múnich ya no sabe que más hacer para jugar de titular. Rinde siempre entrando desde el banquillo. Marca, empuja, hace goles. Lo quiere Inter ya mismo, él quiere jugar más. Sería un error que la dirigencia culé lo deje marchar. Futbolista clave en partidos trascendentales. Partidos donde no alcanza solo con jugar bien.

La entrada del chileno en el inicio del complemento por un inexpresivo Rakitic,  además de su energía contagiosa, solucionó tácticamente el problema del primer tiempo.  De Jong se corrió hacia adentro para jugar al lado de Busquets, ese movimiento liberó el pasillo a Jordi Alba.

El lateral tuvo espacio fértil para atacar la zona. Vidal más adelantado pudo fijar a su marcador y liberar a Messi que jugó con más espacio. En 9 minutos el conjunto blaugrana pasó a ganar el partido con jugadas que llegaron desde el sector izquierdo.

El partido estaba controlado para el Barça hasta la expulsión de De Jong. El Nerlandes no tuvo un buen partido y lo culminó con su doble amonestación. Con un hombre más, el Espanyol se fue arriba en busca del empate que consiguió a pocos minutos del final.

Buen partido de Suárez, Messi desequilibrante por momentos, apagado en otros. Griezmann muy aplicado tácticamente, le falta un poco más de dinámica. Cumple solo una parte del libreto. Empate en Anoeta, en Cornellá. Le está costando al Barcelona los partidos de visitante, comienza la segunda rueda, los 2 equipos igualados en puntos. Tiempo de ajustarse los cinturones, comienza la emoción.

Gustavo Sanchez

@balondominado 

 

El Barça se atasca en Cornellá

Una sonrisa en medio del temporal

E636B257-5695-465C-AA81-2D08FC330662
Zinedine Zidane y su sonrisa. El mejor antídoto para los problemas del Real Madrid. Foto As.com

Terminó el año 2019. El año que Zinedine Zidane regresó al banquillo del Real Madrid. Volvió con la tranquilidad de saber que estaba regresando a su casa. La temporada marchaba fatal con Julen Lopetegui primero, con Santiago Solari después, entonces decidió volver con su sonrisa para aplacar la tormenta.

Zidane es un hombre calmo, no le gusta entrar en polémicas. En momentos de tensión lo resuelve con una sonrisa. No está en las primeras planas de los entrenadores más mediáticos pero ha devuelto al Madrid a competir seriamente. Jorge Valdano lo bautizó “the normal one”. El primer tiempo ante el Barcelona en el Camp Nou puede dar cuenta de ello.

Con una presión alta asfixiante maniató a un Barça que solo atinó a resistir los golpes como un boxeador en un rincón del cuadrilátero. La falta de puntería hizo que el conjunto merengue no se lleve un triunfo del campo blaugrana.

Sin estridencias, con perfil bajo Zizou recuperó a Marcelo, a Kroos (el alemán está haciendo una mitad de temporada brillante) a Isco. El malagueño está gozando de minutos y los está aprovechando. Tuvo paciencia para soportar el aluvión mediático del caso Bale, de a poco el galés se está enganchando a la causa madridista.

Pidió por Paul Pogba, no llegó pero encontró a Pogba en la plantilla: Federico Valverde es la revelación del equipo y del campeonato junto con Ansu Fati. El jugador uruguayo dejó la timidez y se soltó como un volante fantástico. Un box-to-box de los que no abundan en Europa. A día de hoy titular indiscutido relegando a Luka Modric al banquillo.

Puntero en La Liga, en octavos de Champions League, le espera Guardiola con su Manchester City. El Madrid de Zidane aguarda el 2020 con una sonrisa. La misma sonrisa que trajo Zizou para disipar los nubarrones en la Casa Blanca.

Gustavo Sanchez

@balondominado 

 

Una sonrisa en medio del temporal