
Pasados los festejos de Palmeiras luego de coronarse campeón de la Copa Libertadores por segundo año consecutivo, toca analizar que tiene el “Verdão” de Abel Ferreira para ser Bicampéon y además reflexionar si este dominio del fútbol brasileño es pasajero o, por el contrario, llegó para quedarse.
Un partido casi perfecto desde la pizarra para el entrenador portugués. Golpeó apenas comenzada la final con una jugada preparada ejecutada de manera brillante. Generar el espacio sacando de la posición a Filipe Luis y balón al espacio dejado por el ex lateral del Atletico de Madrid, para la llegada de Mayke. Centro atrás para la entrada goleadora de Raphael Veiga. Gol desde el arranque y toda la responsabilidad para Flamengo.
En el complemento el conjunto de Renato pudo resolver con un golazo de Gabigol el acertijo que le había puesto Palmeiras. En el suplementario Deyverson se vistió de héroe para aprovechar el error de Andreas Pereira y batir a Diego Alves en el 2 a 1 definitivo.
Ganar una Copa Libertadores es muy difícil, ganarla 2 veces de forma consecutiva ya es un logro mayor. Abel Ferreira entra definitivamente en la historia del torneo continental. Se consagra como un entrenador muy inteligente que aprovechó todas las virtudes de sus jugadores. En la previa Flamengo era el favorito por los nombres estelares de su plantilla pero el entrenador portugués igualó la contienda con un gran trabajo táctico ejecutado por sus jugadores. Gustavo Gómez, Mayke, Danilo, Raphael Veiga fueron los puntos altos de un conjunto que fue más que las individualidades.
Solo Barcelona de Guayaquil se coló en las semifinales entre 3 equipos brasileños aunque luego cayó sin atenuantes ante Fla. En Argentina solo el River de Gallardo parece poder competir en el continente a pesar de que esta edición Atlético Mineiro lo eliminó sin contemplación. ¿Será que los próximos años la lucha será entre brasileños? ¿Alguien podrá contra el poderío del Brasileirão?
Ojalá que alguien se sume así el torneo sigue ofreciendo la pasión y paridad que históricamente ofreció.