
Terminó la temporada 18/19 para el Atlético de Madrid, temporada de claros y oscuros, positivo fue finalizar segundos en Liga por detrás del Barcelona pero dejando tercero al Real Madrid y logrando una cómoda clasificación a Champions League del próximo año.
En el debe sin dudas la eliminación temprana de Champions League en la noche fatídica de Turín, la Juve remontó el 2 a 0 que había conseguido en el Metropolitano con un hatt trick de Cristiano Ronaldo, ese día el Aleti jugó uno de los peores partidos de la era Simeone y cayó sin atenuantes ante un Cr7 desatado.
El golpe de esa eliminación fue mayor ya que la afición colchonera soñaba con el equipo en la final del 1 de junio siendo locales en el Metropolitano, la temporada terminó aquella noche al pie de los Alpes italianos.
El futuro inmediato es, sin dudas, lo que más motiva a Cholo Simeone, rearmar una plantilla que se queda sin soldados muy importantes de la vieja guardia, se marcha el emblema Diego Godín, Juanfran, Antoine Griezmann, Lucas Hernández y casi seguro Filipe Luis. Habrá que esperar si el mercado de fichajes viene por Rodri y Jan Oblak.
Con mucho dinero para gastar, el entrenador argentino deberá confeccionar una plantilla de autor, podrá elegir y moldear a su gusto a cada futbolista que llegue al club rojiblanco.
Sobre lo que se viene declaró: “Buscaremos futbolistas que tengan la ilusión de venir a jugar con un club importante como el Atlético. Es muy difícil apostar por un crack hecho; no lo vamos a buscar. Buscaremos un jugador como Griezmann cuando vino de la Real Sociedad, como Rodrigo cuando llegó del Villarreal, u Oblak del Benfica… Nosotros somos eso y si no lo sabemos nos tenemos que ir.”
Simeone y el Atlético ante una nueva reconstrucción, pero ésta vez el futuro pinta mejor, con títulos, con nuevo estadio y con millones de euros en los bolsillos, empezar de nuevo para seguir por la senda del éxito.
Gustavo Sánchez