
Finalmente vemos reflejada en la selección, el buen nivel de la Liga italiana. Atrás quedó ese juego mezquino, ese “catenaccio” que durante años fue seña de identidad de los italianos. Hace años que en la Serie A se ven partidos atractivos, con muchos goles. Juventus, Inter, Atalanta, Sassuolo son ejemplos de buen juego. Esta selección de Roberto Mancini es un placer ver jugar. Vuela en el campo. Alto nivel de la azzura. Sin dudas, el mejor equipo del torneo. Ahora le espera España en Wembley en una semifinal apasionante.
Un primer tiempo arrollador. El trío del mediocampo, Verratti, Jorginho y Barella mezclan con precisión y velocidad. Spinazzola e Insigne por banda izquierda fuero un problema sin solución para Meunier. El gol del jugador del Nápoles es un claro ejemplo, conducción sin que nadie salga a presionar, la colgó del ángulo. La nota triste de la clasificación italiana fue la lesión de Spinazzola. Hasta aquí era uno de los mejores jugadores de la Euro. Las lágrimas incontenibles del lateral parece una lesión grave, que lo alejan del torneo definitivamente.
Segundo tiempo fue más de control. Bélgica fue por el partido, no tenía otra opción. El mejor fue Jeremy Doku. El joven extremo del Rennes fue una pesadilla para Di Lorenzo. Imparable en el uno contra uno pero le faltaron socios. De Bruyne fue de más a menos. Lukaku perdió más de lo que ganó ante el muro propuesto por Chiellini y Bonucci. El conjunto de Roberto Martínez tuvo 2 chances claras en los pies de Lukaku pero le faltó esa pizca de suerte. Una vez más Bélgica no puede acceder a una final. Una generación magnífica que le falta dar ese paso definitivo en las grandes citas.
En el otro encuentro, España empezó ganando casi sin querer y le empataron casi sin querer. Luego no pudo doblegar a Sommer en el tiempo reglamentario. En los penaltis, Unai Simón se vistió de héroe conteniendo 2 penaltis. Debe mejorar el equipo de Luis Enrique, aún deja muchas dudas su rendimiento y le espera el mejor equipo del torneo. Tal vez sea una motivación extra eliminar al favorito en la catedral de Wembley acceder a una nueva final como en el 2012.
